Nunca antes había circulado un tren de pasajeros tan largo en ningún lugar del mundo, y mucho menos en alta montaña, en una vía férrea de vía estrecha con estrechos radios de curva, muchos túneles y un viaducto. El intento de récord está previsto para el 29 de octubre, con motivo del 175 aniversario del operador suizo SBB.
El tren de pasajeros más largo del mundo se abastece de energía sostenible procedente al 100% de centrales hidroeléctricas locales. Estará formado por 25 composiciones del último tipo Capricornio. Los Ferrocarriles Réticos los adquirirán antes de 2024 en el marco de la mayor adquisición de material rodante de su historia y darán al ferrocarril de los Grisones un gran impulso hacia la modernización.
Para batir con éxito el récord en la línea de Albula, es necesario prepararse cuidadosamente para varios retos. Uno de los mayores problemas para ese largo tren es superar los 789,4 metros de altitud desde el punto de partida hasta el de llegada. El tren sólo viajará a velocidades de hasta 35 kilómetros por hora y se espera que el trayecto dure unos 46 minutos. En el tren récord del mundo habrá disponibles 4.550 asientos, 150 de los cuales estarán ocupados por invitados. Para evitar problemas inesperados, también es muy importante contar con un sistema de comunicación y un soporte técnico fiables. La comunicación dentro del tren está garantizada gracias a un teléfono de campaña de casi dos kilómetros de longitud instalado por la Defensa Civil suiza. Además, 7 maquinistas y 21 técnicos trabajarán en el tren para garantizar su operatividad.
Para la ejecución del proyecto también es importante el apoyo financiero y tecnológico de los socios, que asciende a cerca de un millón de francos suizos. El principal socio presentador es StadlerRail. El fabricante líder internacional de material rodante es también responsable de la construcción de los automotores Capricorn en Rhaetian Railway.