El Director General de Die Güterbahnen, Peter Westenberger, expresó su satisfacción por el "gran acierto del proyecto de ley del Ministerio de Transportes, que aborda retrasos y errores estructurales del pasado". Westenberger cree que la propuesta de modificación del peaje para camiones de gran tonelaje puede crear una situación beneficiosa para los ciudadanos, las empresas y el comercio, al tiempo que favorece el clima.
Según el proyecto, a partir del 1 de enero de 2024, el peaje para camiones incluirá 200 euros por tonelada de CO2 como costes externos relacionados con el cambio climático. Se espera que este ajuste genere unos 6.800 millones de euros de ingresos adicionales en 2024, que aumentarán gradualmente con el crecimiento del transporte de mercancías. El cambio pretende acelerar la transición de los camiones diésel tradicionales a sistemas de propulsión alternativos y al ferrocarril. Además, según acordó el comité de coalición el 28 de marzo, los ingresos extra del peaje para camiones se destinarán a "movilidad". Este cambio pretende romper el ciclo de depender exclusivamente de la financiación de la construcción de carreteras y destinar en su lugar fondos a las infraestructuras ferroviarias.
Sin embargo, Westenberger subraya la necesidad de que la ley contenga disposiciones precisas sobre el uso de los fondos. Los detalles deben aclararse lo antes posible. Die Güterbahnen aboga por crear un fondo de infraestructuras a largo plazo basado en el modelo suizo. De este modo, los fondos se invertirían en ferrocarriles bajo el estricto control de una empresa de infraestructuras de interés público de nueva creación.
Otro punto de crítica se refiere a la amplia exención de los camiones con sistemas de propulsión alternativos de la contribución parcial al peaje de infraestructura. Westenberger sostiene que la contribución a la infraestructura debería ser obligatoria independientemente del tipo de propulsión. Los camiones eléctricos, por ejemplo, también contribuyen al desgaste de las carreteras y deberían participar en la financiación para evitar nuevos déficits de financiación para el mantenimiento de las carreteras.
Para los ferrocarriles de mercancías, la ley propuesta resuelve importantes desequilibrios de competencia entre la carretera y el ferrocarril. Sin embargo, no se han resuelto todos los problemas. En el futuro, el peaje deberá aplicarse a todas las carreteras, no sólo a las federales, ya que los trenes de mercancías también pagan precios de surco por cada kilómetro de su recorrido.