Como informó RAILMARKET.com a finales de mayo, Alemania inició un experimento único con un billete de tren económico para ayudar a la gente con los altos precios de la energía y, al mismo tiempo, impulsar el transporte público.
Con un solo billete se puede viajar en todos los medios de transporte público de Alemania, incluidos autobuses, U-Bahns, S-Bahns, tranvías y trenes locales y regionales de Deutsche Bahn. Según la Asociación de Empresas Alemanas de Transporte (VDV), en el primer mes de validez del billete de 9 euros se vendieron en todo el país unos 21 millones de billetes especiales.
Ya se han publicado los primeros análisis sobre el impacto del billete de 9 euros en Alemania. El Ministerio de Transportes alemán informó de que el análisis del especialista en datos de tráfico Tomtom mostraba una disminución del nivel de congestión en 23 de las 26 ciudades examinadas en comparación con el momento anterior a la introducción. La mejora de los niveles de congestión fue especialmente acusada en Hamburgo, donde el tráfico de automóviles cayó un 20% en junio respecto a mayo.
El estudio de mercado a escala nacional realizado por la VDV y Deutsche Bahn AG por encargo de los gobiernos federal y de los estados federados sobre el billete de 9 euros confirma las declaraciones iniciales sobre la tendencia al final del primer mes del periodo de campaña. "Es muy satisfactorio que una quinta parte de los compradores declaren que no han utilizado normalmente el transporte público antes. Al mismo tiempo, el seis por ciento de los viajes se habrían realizado con otro medio de transporte distinto del transporte público sin el billete de 9 euros, de los cuales la mitad se habrían realizado en coche. Uno de cada cuatro viajes con el 9-Euro-Ticket, incluidos los viajes de los clientes abonados, nunca se habrían realizado sin el billete", afirma Oliver Wolff, director general de VDV.
La Oficina Federal de Estadística alemana (Destatis) ofrece un análisis más detallado y confirma que en junio de 2022 se realizaron muchos más viajes en tren de entre 30 y 300 kilómetros que en junio de 2019. Así lo demuestra una evaluación especial de los datos de la red móvil. Los desplazamientos se identifican a partir de datos de radio móvil anonimizados y agregados de cambios de posición si las estancias en el lugar de partida y de destino son de al menos 30 minutos.
El mayor incremento se registró en la primera semana de junio, cuando los movimientos en el transporte ferroviario de entre 30 y 300 kilómetros fueron, de media, un 56% superiores a los del mismo periodo de 2019.
El aumento de los viajes en tren se observó especialmente en las distancias de hasta 300 kilómetros. Si se subdividen las distancias, los viajes en tren en distancias cortas (de 30 a 100 kilómetros) estaban aproximadamente al nivel anterior a la crisis en la última semana de mayo, pero en la primera semana de junio ya estaban un 58% por encima del nivel anterior a la crisis. En las distancias medias (de 100 a 300 kilómetros), se produjo un aumento correspondiente del 18% al 64%. Esta evolución fue aún más significativa los fines de semana. Por ejemplo, los viajes en tren en un sábado medio de mayo de 2022 fueron un 18% superiores a los del mismo periodo del año anterior, y en junio este valor aumentó al 83%.
Los datos de la Oficina Federal de Estadística también muestran que se ha producido un descenso moderado del tráfico por carretera. En comparación con 2019, los desplazamientos de entre 100 y 300 kilómetros siguieron siendo un 13% superiores en la última semana de mayo, pero un 6% inferiores en la última semana de junio.
