Con tiempos de tránsito de unos 30 días, los trenes regulares ofrecen una alternativa al transporte marítimo de contenedores de 20 y 40 pies.
Hay una ruta vía Estambul (Turquía) a Tiflis (Georgia), Ereván (Armenia), Bakú (Azerbaiyán), Astana y Almaty (Kazajistán), Ashgabat (Turkmenistán) y Tashkent (Uzbekistán). A través de Constanza (Rumanía), la ruta llega a Tiflis (Georgia), Bakú (Azerbaiyán), Astana y Almaty (Kazajstán), Ashgabat (Turkmenistán) y Tashkent (Uzbekistán). También se transporta por el Corredor Norte a Astana (Kazajstán), Tashkent (Uzbekistán) y Ulan Bator (Mongolia).
Estas soluciones de transporte de RCG atraviesan países no sancionados, lo que permite a los clientes obtener un seguro de transporte. También evitan los puertos de terminales de carga y descarga, así como las terminales marítimas y del interior, actualmente congestionados, lo que se traduce en menos cuellos de botella.