"El Expreso Polar", estrenada en 2004, no es sólo una película; es un viaje mágico que reaviva el asombro infantil que todos llevamos dentro. En el corazón de esta encantadora historia está el tren Polar Express, que es más que un medio de transporte: es un símbolo de fe, imaginación y la magia de la Navidad.
La locomotora de vapor del Polar Express es la manifestación física del mágico viaje del tren, que pasa de ser un tren normal a una gran nave capaz de atravesar terrenos nevados y llegar al Polo Norte. El interior del tren es igualmente cautivador, con acogedores vagones de pasajeros, un vagón restaurante que sirve chocolate caliente y un revisor que desprende autoridad y encanto.
"El Expreso Polar" cuenta la historia de un niño que está a punto de perder la fe en Papá Noel. En Nochebuena, le despierta un misterioso tren llamado el Expreso Polar, que para justo delante de su casa. El revisor le invita a subir al tren hacia el Polo Norte. En el tren, el niño conoce a otros niños, como el sabelotodo, el solitario Billy y la niña que se convierte en la líder del grupo. El viaje está lleno de aventuras extraordinarias, como atravesar enormes montañas, vías cubiertas de hielo y campos de caramelos.
La película está basada en el libro infantil de 1985 del mismo nombre escrito por Chris Van Allsburg. El libro, al igual que la película, se centra en el tema de la fe y la magia de la Navidad. La película, dirigida por Robert Zemeckis, amplía la narración del libro, añadiendo nuevos personajes y aventuras para enriquecer la historia.
Hechos entre bastidores:
- El Polar Express fue la primera película de animación totalmente capturada en movimiento, utilizando una nueva tecnología llamada performance capture para crear los movimientos y expresiones de los personajes.
- La imagen digital de la locomotora que aparece en la portada del Polar Express está basada en la locomotora de vapor real Pere Marquette 1225. Los creadores eligieron esta locomotora por su número, ya que 12/25 es la notación americana para la fecha de Nochebuena. Los creadores también grabaron el silbato y otros sonidos de la locomotora.
- Tras el estreno de la película, varios ferrocarriles turísticos y museos empezaron a organizar recorridos turísticos al estilo de la película. Todos los años, en noviembre y diciembre, trenes especiales recorren Estados Unidos, donde los pasajeros escuchan la conocida historia de Chris Van Allsburg y reciben bombones y galletas, igual que en la película.
