United States Steel Corporation (U.S. Steel), uno de los principales productores de acero, ha transformado dos locomotoras diésel, utilizadas anteriormente en las plantas de Edgar Thomson y Clairton de Mon Valley Works, en locomotoras de batería de última generación. Se espera que la transición a locomotoras alimentadas por baterías reduzca el consumo de gasóleo en estas instalaciones en 40.000 galones anuales.
Fabricadas por Innovative Rail Technologies (IRT), una empresa especializada en soluciones personalizadas de propulsión de iones de litio para el mercado de locomotoras, las locomotoras de batería representan un esfuerzo pionero de U.S. Steel por adoptar tecnologías ecológicas y reducir su huella de carbono. La empresa invirtió más de 2,3 millones de dólares en esta iniciativa de sostenibilidad, y el Departamento de Protección Medioambiental de Pensilvania (DEP) sufragó el resto de los costes mediante una asociación.
Las locomotoras alimentadas por baterías están diseñadas para transportar materiales esenciales como acero, coque, chatarra y mineral de hierro dentro de las instalaciones de la empresa. Con esta transición, U.S. Steel prevé una reducción significativa de las emisiones de partículas en suspensión (PM2,5) de aproximadamente 0,385 toneladas. Esta reducción equivale a las emisiones de 7.000 turismos de gasolina.
Ira Dorfman, director de IRT, se mostró orgulloso de llevar esta tecnología ecológica a la planta de Mon Valley de U.S. Steel. Afirmó: "La tecnología de propulsión por baterías ya se utiliza en muchos medios de transporte, y el transporte ferroviario es el siguiente paso".
