Unas impactantes imágenes(enlace de vídeo aquí) captadas en la estación de Cross Gates, en Leeds, muestran a dos adolescentes arrojando temerariamente una bicicleta de pedales a las vías. Se crea una obstrucción peligrosa, lo que supone un riesgo para los trenes que pasan por la estación.
En palabras de Vicki Beadle, asesora de riesgos operativos de Network Rail :
"Este peligroso comportamiento no sólo puede tener consecuencias mortales o que cambien la vida del individuo, su familia y todos los implicados. Sino que también causa enormes retrasos a los pasajeros que viajan al trabajo, a eventos sociales o a ver a sus seres queridos."
En el último año, la intrusión, el vandalismo y el comportamiento antisocial en la estación de Cross Gates han provocado retrasos de más de 300 minutos en los trenes. Cuando se detectan objetos o personas demasiado cerca de las vías, Network Rail detiene o reduce la velocidad de todos los trenes que circulan por la zona. Esto puede provocar retrasos en toda la red.
También puede salir muy caro a los contribuyentes: sólo el año pasado, el mismo tipo de acciones descuidadas en la estación de Cross Gates costó a la empresa 20.000 libras.
Sin embargo, según el sargento Rob Pile, de la Policía Británica de Transportes, las consecuencias podrían ser más fatales:
"Aparte del peligro evidente para ellos mismos, colocar objetos en las vías puede provocar un descarrilamiento y causar lesiones graves y la posible pérdida de vidas de pasajeros y personal ferroviario".
La policía también ha aumentado las patrullas en la zona en un intento de disuadir este tipo de comportamientos. Los responsables deben saber que serán detenidos y se enfrentarán a acciones judiciales, añade el Stg. Rob Pile.