Las hojas caídas y en descomposición en las vías del tren, también conocidas como hielo negro ferroviario, causan muchos trastornos a los operadores ferroviarios. Las hojas en descomposición, que contienen aceites, hacen resbaladizos los raíles de acero y provocan peligros para detener los trenes y retrasos significativos: los maquinistas deben reducir la velocidad para detener los trenes en los andenes o ante las señales.
El Reino Unido, con su extensa vegetación alrededor de las vías férreas, está cada año a la vanguardia de este campo de batalla. Despliegan trenes de tratamiento de la cabeza del carril (RHTT) que limpian la vía con agua a presión y dejan gel de arena para mejorar el agarre de las vías.La temporada de otoño de este año ya ha empezado en Escocia y en todo el Reino Unido.
Northern, la empresa de Dft OLR Holdings que opera en las regiones de North East, North West, Yorkshire y Humber en el Reino Unido, está probando una nueva forma de abordar este reto. Se ha asociado con Water-Trak Limited y presenta una solución que no requiere que trenes especiales circulen por las vías por delante de sus trenes de pasajeros. De forma similar al enarenado aplicado a los trenes que necesitan mejor tracción, ha equipado cinco trenes con la tecnología Water-Trak. Cuando la tecnología detecta un carril resbaladizo, aplica pequeñas cantidades de agua justo delante de la rueda, limpiando el carril y mejorando la capacidad de frenado del tren.
Las cinco primeras unidades se desplegarán este otoño entre Liverpool, Wigan y Manchester y entre Leeds, Harrogate y York. En 2024, otros once trenes Northern estarán equipados con el sistema Water-Trak.