Alrededor de 40.000 miembros del sindicato National Union of Rail, Maritime and Transport Workers (RMT) de Network Rail se han declarado en huelga en todo el Reino Unido el martes 3, el miércoles 4, el viernes 6 y el sábado 7 de enero como consecuencia de un conflicto salarial con el operador de vías e infraestructuras.
Además, el jueves 5 de enero, día de no huelga del RMT, el sindicato ASLEF se une a la huelga, por lo que este evento se prolonga durante cinco días seguidos.
"No queremos ir a la huelga, pero las compañías nos han empujado a este lugar", dijo Mick Whelan, secretario general de ASLEF, que representa al 96% de los conductores de trenes en Inglaterra, Escocia y Gales. "No han ofrecido ni un céntimo a nuestros miembros en estas empresas, y se trata de personas que no han tenido un aumento desde abril de 2019", añadió.
Mick Lynch, secretario general de RMT, explicó su postura: "Hemos trabajado con el sector ferroviario para alcanzar acuerdos negociados con éxito desde la privatización en 1993. Y hemos logrado acuerdos en toda la red en 2021 y 2022 en los que el Ministerio de Transporte no tiene nada que ver. Sin embargo, en este conflicto, hay un nivel sin precedentes de interferencia ministerial, que está impidiendo que los empresarios ferroviarios puedan negociar un paquete de medidas con nosotros, para que podamos resolver este conflicto".
El Secretario de Transportes británico, Mark Harper, reaccionó en su cuenta de Twitter afirmando que el Ministerio quiere poner fin a estas huelgas con un acuerdo que sea justo para los trabajadores, los pasajeros y el contribuyente: "Me he reunido con los líderes sindicales y les he presentado nuevas y mejores ofertas salariales y de reforma que dos sindicatos han aceptado. Es hora de que los sindicatos abandonen los piquetes y vuelvan a sentarse a la mesa", según él.
Sin embargo, como publicó BBC News, las huelgas de trenes podrían continuar durante meses más, citando al jefe del mayor sindicato ferroviario británico, Mike Lynch, que tenía el mandato de tomar medidas hasta mayo, y podría "ir más allá".
La huelga afectó también a otras compañías ferroviarias. Por ejemplo, la compañía ferroviaria escocesa ScotRail declaró al inicio de la huelga: "Aunque el conflicto no afecta al personal de ScotRail, tendrá un gran impacto en la capacidad del operador ferroviario para prestar servicios, ya que la acción planeada por el RMT afecta al personal de Network Rail en Escocia".
